Monumento a la hamaca (Leticia-Amazonas) Leyendo en estos días la controversia que se generó en Armenia por “el monumento al camello” una obra que el gobernante anterior al actual, erigió en una céntrica avenida de la ciudad a la cual le dio nombre y con el cual quería dejar plasmado el lema de su campaña electorera que fue la de “trabajar duro” y que ni su sucesora ni el pueblo creen que representa esa gestión ni que el camello es un animal representativo de nuestra fauna, está en el proceso de bajarlo de su pedestal y tirar miserablemente por la borda esa platica invertida (45 millones).

Como es posible que en todas las ciudades habiendo obras y necesidades más prioritarias, los gobernantes malgasten el dinero de los colombianos en obras y monumentos absurdos e innecesarios?

Está bien que haya estatuas o monumentos representativos que identifiquen ciudades ya sea por su pujanza, raza, ancestros, fundadores, productividad, personajes históricos etc,que le dejen al visitante o las personas que lo visualicen un legado histórico motivante, o ancestral como por ejemplo el monumento que queda ahí mismo en la ciudad llamado “Monumento a los Fundadores” cuya figura es un tronco con un hacha en actitud de partirlo que representa la fortaleza de los colonos para derrumbar y hacerse a la tierra de cultivo y habitación y otros que son sello de identidad de la ciudad en donde se encuentran como por ejemplo:

El Monumento a la Pujanza en Desquebradas (Risaralda), el Sebastián de Belalcázar en Cali, el Monumento al Sombrero Vueltito en Córdoba, el Monumento al Pantano de Vargas en Boyacá, el Bolívar Desnudo en Pereira, la India Catalina en Cartagena ,y las Gordas de Botero en Medellín, entre otros, pero hacer un monumento sin ningún significado por el solo hecho del gobernante hacerse el importante al dejar plasmada una placa en el, como un buen acto de su gestión gastándose un dinero que pudo haber invertido en una obra prioritaria, hubiera sido un mejor regalo y esto lo digo con respecto a un monumento que observé en Leticia llamado “la Hamaca” y que me llamó mucho la atención: primero por su ubicación y segundo por su material y representatividad y vuelve y juega, yo se que a mas de uno no le va a gustar mi comentario pero lo sigo diciendo: para alguien que no viva en la ciudad y que ha sido recorrido, le queda muy fácil detectar de entrada las anomalías y problemas que se presentan en la misma porque tiene referencias comparativas, caso contrario ocurre con el habitante que todos los días convive con la irregularidad por lo cual todo se le hace normal.

Y aunque este monumento no es reciente, esta es una de las razones por la cual la ciudad está como está por que los dineros se malgastan en unas obras que no representan nada para la ciudad y si lo representan son de mala calidad, sin proyección futurista, obras de paso como para que el pueblo vea su gestión o en otros términos pañitos de agua caliente, pero eso si, obras benefactoras económicamente al gobernante quien otorga éstas al patrocinador de campaña o al contratista amigo como en el caso de este esperpento de monumento que costó una millonada y que sé que muchas personas de la ciudad ni conocen pero ahí está como un testigo mudo y símbolo de despilfarro.

Que razón tenía un gran amigo leticiano inconforme con este desangre cuando le pregunté por el significado de la obra, así me respondió: Ahí están pintados mis paisanos gobernantes, mientras en Antioquia, Caldas, el eje cafetero y otras ciudades hacen monumentos en donde el hacha, el machete, los arrieros, las mulas exaltan la verraquera, el trabajo y la pujanza de los ancestros aquí hicieron una hamaca, el monumento a la desidia y la pereza. Y no son ganas de crear malestar, pero las cosas se hacen bien o no se hacen y si no vean el atractivo “Monumento al Bufeo” que está situado al frente de la biblioteca del Banco de la República y les preguntó: será que el bufeo del Amazonas respira por branquias?…por que este si las tiene.

Carlos Javier Londoño O