Se cerraron las inscripciones de candidatos para la próxima contienda electoral política que se llevará a cabo el próximo 25 de octubre en todo el territorio nacional.

Como quien dice ya están inscritos todos los que son, pero en esa fecha, no van a elegir a todos los que están. Con el estilo que me caracteriza en donde le digo al pan, pan y al vino, vino y hablando sin los eufemismos con los que ahora el gobierno y la información mediática nos quieren ocultar o suavizar la verdad sobre las cosas y la problemática por la que estamos atravesando, empezaré de nuevo con mis crónicas sobre diferentes tópicos y sobre todo por el que ahora nos ocupa y es el de la política.

En Leticia se viene hablando y es la intención, desde hace varios años, el actuar por un cambio radical en los métodos de nombrar, votar y elegir a sus administradores, para acabar con ese continuismo político nefasto que viene azotando, el bienestar y los intereses de la región.

Observando la realidad, vemos que las cosas en vez de mejorar van de mal en peor, pues de cambio no se avizora nada, por el contrario, sin ningún asombro, vemos como aparecen de nuevo en la palestra política amazonense, prostáticos aspirantes de mi época los que ya tuvieron su agosto en la administración disfrutando las mieles de la corrupción quienes pasaron a la historia regional por la inoperancia en sus administraciones en contra del pueblo que los eligió, pero si, con una favorabilidad a sus haberes personales; época en donde tuvieron la oportunidad de darse a conocer por sus buenas acciones cosa que no hicieron y hoy llegan de nuevo con el cinismo del caso, a engatusar al pueblo sin memoria en donde lo más seguro es que sus propuestas de gobierno son la de mejorar sus ingresos y asegurarse una buena pensión, porque aquello de hacer “algo” por el pueblo…no creo que esté entre sus objetivos.

Vemos también, sin que sea cosa del otro mundo, como entre los postulados a ser elegidos, aquellos entre los que aspiran a repartirse el ponqué presupuestario y burocrático de la región, hay personajes , y sin que a nadie le importe, que de una u otra manera han sido requeridos por la justicia, por haber sido vinculados a procesos, o por haber sido denunciados por los delitos normales comunes en las huestes politiqueras regionales como son: cohecho, concusión, tráfico de influencias, enriquecimiento ilícito, peculado por apropiación, entre otras infracciones, delitos que para esa región, no son impedimentos para aspirar a regir su destino, en una ciudad en donde la mala memoria de sus habitantes favorece al aspirante o favorece al electorado.

Por esta razón: ya comenzó la guerra cibernética por las redes en donde todo es válido: el chisme, la infamia, el desprestigio o denigrar del adversario, con tal de defender los intereses del aspirante, no importando pisotear al oponente.

Ya empezaron a aparecer los borregos útiles a los que les pagan por crear páginas por las redes con nombres ficticios, sin dar la cara, criticando, denigrando y volviendo ropa de trabajo a todo aquel que se atreva a expresarse en contra del candidato que les está pagando, tal como me ocurrió a mí hace unos días, con las críticas a un artículo extraído de la revista Cromos en donde se habla de los antecedentes que tuvo o tiene uno de los aspirantes a la gobernación, esto con el ánimo de refrescarles la memoria a los electores, y que subí a la página “La cosa política del Amazonas” en donde una tal “Doña Bárbara” que para mí es un varón afeminado que se escuda tras un perfil simplemente para “Joder”, porque algunos no tienen conocimiento de causa, no tienen argumentos, ni ortografía para defenderse, solo lo hacen para demeritar el escrito, pues la tal señora criticó el articulo como que fuera de mi autoría ignorando, porque no saben leer o no asimilan lo leído, que fuera publicado por la revista Cromos que a lo mejor hablaba alguna verdades de su candidato.

Ese mismo artículo lo subí a la página “Rescatemos al Amazonas” desde donde el nuevo politólogo que tiene el Amazonas, administrador de la página, lo borró las veces que lo subí, y tiene hasta razón, no le conviene que la gente sepa algunas verdades sobre su enmermelado aspirante a la gobernación.

Caso parecido le ocurrió a una paisana que subió a la misma página un artículo titulado “ “Quien ronda a los contratistas” el cual le fue borrado las veces que lo subió, pues sin ella saber, es un artículo bastante nocivo para un familiar que manipula el carrusel de la contratación en el amazonas.

Y así por el estilo, ya vendrán los panfletos denigrantes y difamatorios a ciertos personajes aspirantes a ser elegidos, más esto no es raro porque así es como en una forma vulgar, irrespetuosa, alevosa y poco ética se maneja esta contienda electoral en una ciudad en donde su majestad el dinero obnubila la mente a ciertos electores que como ovejas van al matadero a votar por el mejor postor económico, sin importarles lo que ese voto representa para el futuro de la región.

Como recuerdo las palabras de algunos contemporáneos, cuando en aquella época de la bonanza cocalera decían: si quieren conseguir plata en esta tierra, métanse a traquetos, políticos o aduaneros. Con el respeto que todos me merecen, creo que estas palabras siguen vigentes.

Carlos Andres Londoño